Testimonios

Retiro Nagas

El curso de los Nāgas fue una pasada. Nunca imaginé que conectaría tan a fondo con la naturaleza y conmigo mismo. Aprender sobre estos seres míticos y cómo todo está conectado me abrió los ojos. Cada clase fue una aventura, como si descubriera secretos del universo y de mi interior que ni sabía que existían. La guía que nos dieron fue super cercana y entendida, y se creó un ambiente donde todos nos sentíamos cómodos compartiendo y explorando. De verdad, este curso me ha cambiado, y estoy mega agradecida por la experiencia.

Carolina S

Retiro Vipassana

Una gran experiencia donde me he descubierto mas allá de lo que he alcanzado con otras prácticas. Entrar en lo más profundo de mí, en aquello que nunca hubiera imaginado que estaba ahí y atravesarlo en un lugar totalmente contenido, protegido y seguro. Todo colocado y pensado única y exclusivamente para potenciar y mimar la experiencia que estuvimos viviendo durante dos días.
Los otros dos días están pensados con muchísimo amor para asentar y significar la experiencia, para poder sacarle todo su contenido y VER realmente como continuar caminando. Para mí, van pasando los días y sigue asentándose y voy dando pasitos. Voy dándome cuenta del cambio tan potente que ha supuesto para mí la experiencia de este seminario. Ambas partes de él.
Gracias a tod@s por vuestra presencia y vuestro amor. Gracias Gana, Carmen, María, Mercedes, Pepa por todos los mimos.

Raquel

Retiro Vipassana

Una experiencia única. Unos días donde poder experimentar el silencio y asomarme a mi interior desde un lugar de seguridad, cuidado y protección. Unos días donde entender la simplicidad de la vida, donde darle lugar a las cosas más sencillas y, a la vez, más importantes de la vida.
Conexión, amor, cuidado, encuentro, protección, nutrición del cuerpo y del alma, aceptación y abrazo con uno/a mismo/a. Ha supuesto un lugar donde SER, sin condiciones.

Toñi

Retiro Vipassana

Para mí, este retiro ha sido una EXPERIENCIA INSPIRADORA que me está marcando una ACTITUD DE VIDA.
Estando en silencio, sin ver ni oír, pude sentir a mi alrededor un espacio de TANTO AMOR Y CUIDADO que empecé a ser consciente de que todo seguía
sucediendo y yo podía verlo, oírlo y sentirlo.
Ese mismo espacio de amor inspirador, empecé a aplicarlo dentro de mí y pude ver con claridad que no era lo mismo estar pendiente que presente. Solo observando anclada a mi respiración, ese pendiente se relajaba y así, partes de mí “tapadas “, cambiaban el gritar por el expresar liberándose dolor.
Profundamente agradecida porque elijo cambiar el tapar por cultivar ese silencio, amor y cuidado donde la presencia sucede y el dolor se expresa porque el “mío ” y el “yo” relajan su buscar y compensar.

Esther

Déjame tu comentario

Strong Testimonials form submission spinner.

Campo obligatorio

rating fields